Desde hace un tiempo he dedicado importantes esfuerzos a modificar mi herencia moral, el peso cultural que delimita nuestras acciones y decisiones va mucho mas allá de lo que somos capaces de imaginar, es verdad que gracias a mi actividad puedo compartir con diferentes culturas y enriquecerme de ellas, sin embargo algo que me he podido dar cuenta es que donde sea que vayas y con cualquier ser humano que trates, su condición humana Per Se, siempre tiene un peso que, insisto, va mucho mas allá de lo que en algunos casos estamos dispuestos a soportar. Me levanto, pienso; camino, medito; reflexiono, actúo. Son algunos de los procesos que llevo a cabo todos los días de forma automática, es mi cultura que me ha enseñado a ser así, mi forma de ser es lo que soy en concreto. Aveces estamos sujetos al juicio de los demás, a valoraciones del tipo "bueno" o "malo"... independiente de que esto me parezca simplista. La influencia del catolicismo y la religión en su generalidad recae sobre todos nosotros, incluso aquellos que nos hemos llamado "ateos" (aunque a ratos pienso que un agnosticismo es mucho mas mesurado) desde hace mas años de los que me acuerdo, todos sustentamos esta moral, desde donde estructuramos la ética. Desde que me empecé a dar cuenta de esto, decidí hacer todo lo posible por erradicar este peso de mi conciencia, limpiar mi memoria y "mi forma de ser" llevarla sencillamente a otra perspectiva, donde la bi-valencia sea una muestra de inmadurez mas que de adaptación social. El otro día paseaba por las calles de Santiago junto a una persona que es de exactamente el otro extremo del planeta y me deleitaba morbosa-mente analizando este tipo de "detallismos" que poseemos las personas. Temas como culpa y pecado parecían tan recurrente en ella, que luego de un rato incluso tuve que volver a concentrarme en mis máximas y re afirmarlas con mucho esfuerzo. Todo este asunto me resulta tan increiblemente repulsivo y coartante, el infinito espectro de posibilidades que se nos presentan en el universo son castradas de forma desmedida y fundamentalmente lo que hacemos es privarnos de conocimiento que está ahí presente y disponible para nosotros. Una visión Antropocentrista permite solo una visión de las cosas, pero una vez mas citando a la lógica universal... la lógica universal existe, pero no es necesariamente lógica o mejor dicho, rígida. No tengo porque solo tener una visión de las cosas, no debo ver con mis ojos de humano todo lo que humanamente se me presenta, la condición humana es innegable, pero no por ello debo quedarme sentado y ausente de esfuerzos por trata de lograr algo de avance en eso. Es aqui donde decidí borrar pesos morales de mi conciencia, hace unos dias hablaba con mi colega y ella me decía "yo antes pensaba mucho en la culpa, pero cuando te conocí a ti me di cuenta de que no era tan importante"... Porque no se trata de hacer cosas para luego arrepentirse, se trata de hacer lo que quieres porque lo quieres... les suena esto parecido a alguna otra cosa?... Si, se llama instinto. Nunca he visto a un animal sentir pena o alegria de si mismo, a pesar de la barrera idiomatica, a diferencia del dolor o la alegria, siquiera he visto alguna conducta que se le asemeje, a pesar de que ostento una posición anti-especista, dudo de que en los animales se hagan presenten conceptos como moral o etica, es aqui donde estos mismo me comienzan a parecer nefastos. Estuve estudiando hace un rato sobre algunas culturas mesoamericanas donde existen algunas figuras o "entidades" que como suele ser recurrente en las culturas indígenas, fluctuan entre la realidad y la ficción, se trataba de los Nahuales o sus similares los Characoteles... se trata de Hombres-Mujeres, que pueden cambiar propiamente tal su forma humana a forma animal de manera conciente y voluntaria, cuentan las leyendas que se les pudo ver durante la noche convertidos en cerdos, perros, gatos u otros animales, asi también algunas tendencias esotericas insisten en formas animales que nos representan. Yo no quiero moral, no quiero sentimientos de culpa ni de pecado, hace tiempo que lucho contra estos pero quiero explorar la otra visión del mundo, la que no es desde el punto de vista del ser humano sino que una enajenante de este. Simplemente porque a lo largo de los años no puedo sentirme mas que defraudado y avergonzado de mi condición de humano y por el contrario crece a paso firme mi admiración por los animales de los cuales trato de aprender todo cuanto puedo acerca de su comportamiento, porque en ellos no existen estos "detallismos" que sinceramente considero nefastos. Propongo dar paso sin miedo al feralismo, han escuchado hablar de los Niños Ferales?... al estilo de Romulo y Remo, quienes fueron criados por una loba, sin embargo esto no es solo una anécdota histórica para el lloriqueo de un imperio, sino que luego de eso y me atrevería a decir hasta nuestros días sabemos de casos de niños que han crecido en condición de salvajismo. Han sido secuestrados de sus ambientes "naturales" y humanizados y socializados alegando "ayuda humanitaria"... sencillamente creo que esta practica tiene como centro ideal, una arrogancia y un sadismo disfrazado de buena voluntad. Si no es así entonces porque enseñar a una criatura a sentir como un humano, donde habitan sentimientos desagradables como la pena, vergüenza, tristeza, melancolía, nostalgia, envidia y dolor? Que es lo que nos hace diferente de los animales? La regla oficial dice que es la razón, la capacidad de reflexionar sobre nuestros actos y emitir juicios sobre estos y por ende considerarlos en el futuro, tener un razonamiento nos permite estar al tanto de lo que sucede en nuestro pensamiento. Cual es el opuesto de razón?... Pasión. Por lo menos ya tengo una pista hacia donde me tengo que dirigir en mi lucha contra la condición humana, debo de alejarme tanto como pueda del razonamiento y acercarme en la medida de lo posible al ejercicio de las pasiones. Siendo honesto, creo haber siempre sido una persona apasionada, me gusta disfrutar de las pasiones del corazón y de los placeres básicos, lucho contra algunos en verdad, como el miedo, pero en general me gustan y soy asiduo a practicarlos. Me he descubierto a mi mismo en algunas ocasiones teniendo actitudes y conductas totalmente fuera de cualquier raciocinio, específicamente cuando se desatan las mas básicas; instinto de sobre-vivencia por ejemplo cuando en mas de alguna ocasión tuve que correr por mi vida, con el corazón a mil y todos los sentidos activados; en peleas cuando no sientes los golpes ni tampoco estás consciente de lo que haces, nublado, simplemente quieres seguir viviendo y para eso o arrancas o luchas hasta la muerte. En las penas y dolores mas profundos de mi vida he pensado en la muerte como cualquier ser humano y cuando se trata de vivir, el instinto de reproducción es el primero que viene a la mente. El sexo es probablemente uno de los mas faciles de explorar donde también me he descubierto a mi mismo en medio de una situación que está absolutamente fuera de mis manos, he escuchado gruñidos y he sentido fuerzas que desconocía tener. Todo esto no hace mas que llamar mas y mas mi atención, recuerdo claramente la vez que experimenté con LSD y donde una de las cosas que mas me interesó fue la sensación de fuerza ilimitada y energía... sentía que podía hacerlo todo. Simplemente extiendo la invitación a un sector del conocimiento que excede nuestros limites de comprehensión, experiencias que no podremos tener a menos que optemos por recibirlas con los brazos abiertos, yo quiero sentirme un poco menos humano y un poco mas animales, quisiera ser un poco de los dos porque tampoco me he identificado mucho con lo que soy. Esto es lo que llamaremos Hommo Ferus, un humano feral.
